#Columnas: Amo la intensidad…

¿Por qué hablar de intensidad atemoriza tanto si es el sentimiento que nos invita a crecer?

Varias veces he escuchado que la intensidad es, finalmente, visto como un defecto, ya que termina ‘ahogando’ a las personas, pero tengo mis reparos.

No conozco el término de querer a medias. Si quiero, me entrego. Me vinculo y conecto desde el alma, no superfluamente. De lo contrario, no genero conexión.  Si bien, soy una persona bastante racional, que necesita explicaciones lógicas, soy bastante pasional  con los vínculos. No fuerzo nada. Si funciona y es mutuo: estupendo, pero si no, sé que di todo, que entregué sin medir, y aunque duela porque no todos aman bien.

Si intensa es ser interesada por lo que hace, por lo que te cuentan, detallista, cariñosa, preocupada, hacerse el tiempo para compartir con el otro, escuchar al otro. 

Sí, soy muy INTENSA porque en verdad, es una virtud, ya que es una muestra de amor, no de control.

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